Hola, estoy aquí para hablarles sobre algunas irregularidades que he observado en el transcurso de los últimos años. Ver a la sociedad me hace pensar en sus cambios repentinos y en lo que esto afecta al mundo. Hemos estado viviendo en un mundo dominado por la tecnología, cada ves avanza más y con ello la incomunicación. Hoy día nuestra forma de comunicarse es a través de aparatos y no cara a cara. La sociedad se ha visto acostumbrada a este tipo de sistema en el cual cada vez nos termina por acabar a nosotros y luego al planeta tierra quien recibe todos los males que hacemos. Ahora los jóvenes se la pasan en la calle desprevenidos con blackberry, ipod, entre otros artefactos tecnológicos que nuestros amigos los japoneses van creando. Los niños mueren por tener unos de estos en sus manos sin saber manejar ni la mitad de las funciones que tiene, solo lo tienen para estar en el nivel como otros y por llamado “PIN” que parece ser muy popular en este pequeño teléfono. Asimismo cada vez deseamos tener lo último en tecnología y dejarnos excitar y convencer por todo lo que nos ofrece, terminando siendo otro cliente más en está pequeña, poderosa y malvada industria; para que las mayoría de las veces termine este aparato dentro de un closet o una cochera. La tecnología está llegando a su cumbre máxima, y gracias a ella el mundo se encuentra llena de heridas provocada por nosotros mismos. La gran parte de esto se encuentra en países como Japón, Estados Unidos, Rusia, China. Quienes tienen aquella mayor industria exportada en todo el mundo. Miles de atentados naturales han ocurrido siendo estas capas unos de los llamados para la concientización, sin embargo parece ser inimportante entre los creadores todo esto que jamás me gusto. La naturaleza ha atentado contra nosotros, podemos llegar a un tiempo donde la mitad de la tierra no exista más en el mapa. Siendo está nuestro principal hogar, y los mismos habitantes han probado experimentos en ella, logrando así no solo la contaminación sino también reacciones nuevas en el océano, siendo Japón el principal país que destruye nuestra casa, encontrándose él en medio del océano. La verdad no me gustaría despertar una mañana y me digan que Japón se hundió y no exista más, que en algún futuro termine siendo como una leyenda.
Asimismo, mientras camino por las calles de mi ciudad he visto como miles de personas se encuentran en las calles sin techo, comida y abrigo, o como he conocido a personas viviendo arrimados en casas ajenas, apartados de todos sus recuerdos. Mientras hay personas que son dueños de cientos de casas en varias partes del mundo, automóviles, he incluso comerciales, teniendo ello como algo más, sabiendo que afuera en el mundo real, donde se encuentran los que resisten, necesitan de un hogar estable para su familia. Algunas de estas personas solo siguen comprando y haciendo negocios sucios en todo el mundo sin saber que todavía no existe ataúdes con bolsillo, solo estando consiente que después de la muerte queda un alma que se dirige a otra vida en el paraíso sin necesidad de lujos materiales, quedando ello en la tierra y la experiencia y la sabiduría siempre contigo. Ahora tal vez ustedes estén leyendo esto y digan: “está nena si es boluda, para que dice estas cosas”, pues está boluda dice las cosas no porque lo he oído o visto, sino porque lo he vivido. Al igual que otras personas que han vivido dentro de la injusticia, maldad, violencia, envidia e hipocresía. Hoy las personas están más inconscientes, algo no se está haciendo bien. En los últimos años ha subido el número de jóvenes que son madres y padres siendo aun muñecas y soldaditos. Observar a una niña que aun sigue jugando y en su vientre tener un fruto que crece, por querer jugar a un juego del que tal vez nunca le hablaron. Conocer a muchachos que antes de crecer, deben responsabilizarse por la inconsciencia de no pensar en acciones futuras. Criar, educar y enseñar a un hijo sin ellos antes ser criados o educados. Muchas veces por ellos no pensar en lo que parecía un juego trajera consigo una consecuencia, terminan por abandonar a estos niños, haciéndolos pasar frío, por la culpa de dos adolescentes que solían jugar a la mamá y el papá. Sin embrago a su vez aplaudo a los que siguen adelante y aun así todavía siendo niños asumir la responsabilidad de ser padres a temprana edad.
Estamos en un tiempo complejo, materialista, sucio y malvado en donde el mundo está llegando a su cumbre máxima de odio, rabia, de tecnología llevada para todas partes. Donde muchos quieren ser dueños del mundo y manejarlo a su manera, algunos dicen estar en el mando, prometer falsas promesas, y haciéndoles creer a su pueblo en cosas que jamás ocurrirán, siendo está además una táctica de ilusión y motivación. Poco a poco nos van quemando el cerebro, llenándolo de sucias mentiras, mientras que ellos siguen permaneciendo en el poder, convirtiéndose ellos mismos en tiranos y usurpadores.
Nuevamente está es una lucha a la que debemos resistir. Más no podemos permitir mayor tecnología, mayor pobreza, mayor injusticia, poder, pues solo trae un poco más de todo ello, y la tierra solo está pidiendo paz. Nos encontramos en una guerra fuerte, que tal vez pueda acabar, quedando solo con pocos guerreros sobreviviendo a todas las catástrofes ocurridas. Está es nuestra oposición a la que la mayoría estamos resistiendo, ahora solo faltas tú. Te toca decidir. ¿De qué lado estas?, solo te toca decidir eso. Puedes agarrar el camino más fácil y ala vez el más difícil, el de modificar al mundo, para que todos estemos bien, y no solo unos pocos. Y tal vez puedas pensar que cambiar el mundo es cosa de una utopía, ya que es difícil de tener un mundo mejor, pero en realidad lo difícil es asumir el cargo de querer modificarlo así sea un poco, porque mientras más nos quedamos sin hacer nada por ella se va muriendo llegando a lo que muchos conocen como el fin de la tierra.
Atte: Estefania Rodrigues G.
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